viernes, 26 de noviembre de 2010

REFORMA O RUPTURA

No hay salida "progresista" a la crisis

Por Pedro Montes

Toda organización de izquierdas que se precie tiene como objetivo una salida progresista a la crisis. IU ha sostenido en su propaganda y en sus documentos que hay una salida progresista a la crisis.
La última declaración conjunta de CCOO y UGT de análisis y propuestas tras la huelga general es un compendio de medidas progresistas para enfrentar la crisis, con un título expresivo: “Recuperar derechos y defender el estado social”. Hasta el gobierno del PSOE, antes de quitarse la careta en mayo, hablaba de una política para remontar la crisis sin regresión del estado del bienestar.
En este afán no hay nada de sorprendente: es lo menos que puede decirse en una situación tan desoladora, donde los ataques a las condiciones de vida de la inmensa mayoría son continuos. Sin embargo, quisiera hacer algunos comentarios para aclarar  lo que entiendo por  eso de “la salida progresista a la crisis” y la coherencia política y económica que tal demanda lleva consigo. 
Mi propósito es demostrar que no hay salida progresista sino únicamente un futuro traumático,  convulso, propenso a conmociones. Esto para la izquierda implica prepararse para cambios sustantivos que no sólo han de romper con los dogmas neoliberales sino también con la  lógica del capitalismo.